“Anarquismo para principiantes”
Por: Compa Vic
«Hacer la revolución es implantar en la sociedad presente algo de lo que será la sociedad futura, ya que el hombre, aunque influido por el medio, también puede ir cambiando su medio; la revolución hay que hacerla primero en las cabezas y en los corazones”. (Emmanuel Mounier)
-¿Cómo pueden vivir sin gobierno?- le preguntó el niño Juan al viejo Joel.
-Pues así, niño. No necesitamos gobierno- respondió sin pensar mucho la respuesta.
-Pero la gente necesita un orden, ¿no?- insistió el pequeño.
-Y no ve niño Juan que estamos perfectamente organizados. Nuestras fábricas están libres de patrones y por lógica de explotación. Nosotros nos ponemos nuestras metas y objetivos para producir lo que siempre ha sido nuestro.
-¿Y quién de ustedes es el que gana más, señor Joel?
-Pues nadie, niño. Para empezar la moneda ha sido eliminada, ya que nada más crea egoísmo y ambiciones que algo que se le establece un valor. Lo que producimos es repartido de acuerdo a las necesidades de cada uno y si requieren más, con toda confianza lo pueden tomar.
-Pero… ¿qué pasa si alguien roba?
– ¿Y por qué habrían de robar si no se tiene la necesidad? La delincuencia es una enfermedad social que se produce por el deseo de tener lo que otros poseen; es por eso que nosotros no necesitamos de policías ni militares, si alguien comete una falta hay que llevarlo a un nivel de consciencia donde comprenda la importancia del colectivo y de la solidaridad.
-Entiendo muy bien, señor Joel. Pero explíqueme qué pasa con la gente que no está de acuerdo con todo lo que me dice.
-En una sociedad como la nuestra tratamos de preservar la autonomía individual del pensamiento, ¿pero crees Juanito que exista alguien en el mundo que no le guste ser libre?
Es por eso que estamos tan bien organizados, porque encontramos un objetivo en común, que es librarnos de cualquier tipo de opresión. Todos lo hemos entendido así y siempre nos sacrificamos por el colectivo. Un día podrás verme en la oficina de la fábrica y a la siguiente mañana labrando el campo; una tarde compartiré mi trabajo y otras veces me prestarán sus servicios los compañeros. Todo depende de las necesidades que tengamos en conjunto.
-¡Ah!, ya entiendo. Es como una cadena de favores. Oiga Don Joel, pero no me ha hablado nada del papel de la mujer en su comunidad.
-Tienen las mismas oportunidades y responsabilidades que los hombres. El papel de la mujer no es atender la casa, criar hijos y hacer la comida. Eso se piensa en otras sociedades que ven a la mujer como algo inferior, pero ellas tienen el mismo derecho a saborear la libertad como lo tienen los animales y cualquier ser vivo. Por supuesto que la mujer también trabaja y apoya las causas de la comunidad, pero lo hace de la misma forma que nosotros.
-Y a todo esto, ¿usted es casado, Don Joel?
-Claro que no. Tengo a mi pareja y vivimos en amor libre.
-¿Amor libre?
-Así es, niño Juan. Creemos que no necesitamos firmar algún papel, ya que no queremos ser esclavos para el Estado ni para la Iglesia. Además, esto no es un asunto de dominación, el hombre tiene que ser hombre, la mujer es mujer, y en conjunto somos dos seres humanos en libertad. “Apoya el amor libre. Si no es libre, no es amor, Juanito”.
-¡Caray!, me sorprende con todo lo que me cuenta, Don Joel. Supongo que en este lugar los niños somos los únicos que tenemos que andar siguiendo órdenes de los mayores.
-Pero qué dice usted, Juanito. Los niños son las personas más felices en este lugar. Nosotros tenemos la “escuelita libertaria” para ustedes. Imagínate un lugar donde no tengas que llevar uniforme, no existan exámenes ni castigos, donde decidas que aprender cada día y además hacerlo jugando. ¿No te gustaría?
– Mucho, Don Joel. Pero tengo que confesarle que no soy muy bueno sacando notas altas.
-¿Y cómo para qué ocupas un número? Tú eres Juan, no un 10 o un 5. En esta escuela lo que importa es que expreses tu manera de pensar, que razones y saques tus propias conclusiones. Eso es la libertad, Juanito.
-¿Entonces los niños podemos hacer lo que queremos?
-No de esa forma. Ustedes siempre van acompañados por sus padres en ese camino de la libertad, misma que ustedes aprenden valorando cada decisión que toman y asumiendo la responsabilidad que ésta conlleva.
-Todo suena perfecto, pero la verdad es que parece muy aburrida la vida trabajando y estudiando nada más.
-Oiga niño Juan, ¿y quién le dijo que aquí no nos divertimos? Tenemos nuestros espectáculos de música, teatro callejero y hasta partidos de futbol. Claro que a todo le tratamos de poner un mensaje libertario, pues no podemos negar nuestra esencia.
-Ya me tengo que ir, sólo contésteme una cosa más, Don Joel. ¿Por qué en la televisión hablan tan mal de ustedes?
-Quizás sea ignorancia, desprecio o hasta miedo. No lo sé, Juanito. Pero de lo que sí estoy seguro, es que la razón y el corazón no siempre están juntos.
Libertad y Auto-gestión.
(Lucha anticapitalista)
Por Mish.
“de lo que se trata es de depender lo menos que se pueda del capitalismo”
Hablar de autonomía y de autogestión como herramienta de lucha y más aún como forma de vida resulta demasiado complejo cuando se tiene en cuenta todo el proceso por el cual se tiene que pasar antes de llegar a ser 100% autónomo.
Y es que si hablamos en términos prácticos, difícilmente una persona puede llevar una vida auto-gestionada al pie de la letra. Pero comencemos con lo primero de la lista, el concepto; difícilmente se puede encontrar un concepto que defina el hecho de que una persona generé sus propios recursos, ya sea alimenticios o laborales[1], en algunos lugares se le llama un tipo de vida autosustentable[2], en otros se le puede encontrar como auto-gestionada[3] y en otro como autónoma[4]. Sea cual sea el nombre que se le ponga todos estos conceptos tienen en común el hecho de que es el mismo ente el que genera sus recursos y que está en equilibrio constante con su entorno, radica principalmente en una auto-organización que apunte a situarse como individuo en todo el sentido de la palabra. En resumen depender lo menos que se pueda del entorno.
Si logramos enfocar estos conceptos al margen del funcionamiento del sistema capitalista[5] podemos entender fácilmente que si bien es difícil desligarse de ese sistema no es imposible que poco a poco nos vayamos desligando de él.
Sin embargo no es una tarea fácil, dejar de depender del sistema capitalista significa alejarse de todo aquello que nos han enseñado en escuelas, en la familia incluso en las calles, esos juicios que apuntan a descalificar al que no es una asalariado, al que no trabaja como profesionista o al que no vive como el mismo sistema dicta, innumerables son los casos en donde se juzga de “miserable” a una persona que decidió no jugar en el juego del capitalismo, no alienarse con las trampas que el mismo sistema pone y decidió no tener esos grandes lujos (innecesarios y costosos) a favor de llevar una vida digna y en resistencia.
La auto-gestión no es tarea sencilla, y muchos anarquistas lo sabemos, sin embargo 
tampoco es nada nuevo para nosotrxs, en suma, anarquía significa querer la libertad, y querer la libertad no es lo mismo que, como muchxs confunden, es querer un libertinaje[6], la libertad en el mundo de la anarquía es una que conlleva una responsabilidad enorme, una responsabilidad que aun hasta la fecha muchxs personas no se atreven a llevar, y es la de ser responsable de unx mismx, la de cuidar de la propia persona, la de no permitir ser pisado al mismo tiempo de no pisar a nadie más, ya sea una bota política izquierdista o derechista, ya sea, y que importa en el presente escrito, una bota ideológica, en este sentido, auto-gestión desde el punto de vista anarquista significa ser capaz de tomar la responsabilidad de unx mismx, sin depender de otrxs en la medida en la cual nos convirtamos en parásitos o sanguijuelas.
La idea de “D.I.Y.” (Hágal
o usted mismo) va en estrecha relación con la idea de la auto-gestión y en suma es en la práctica cuando logramos ver hasta qué punto somos capaces de responsabilizarnos de nosotrxs mismxs, la era de la internet nos da multitud de opciones y accesos al cómo hacer nuestros artículos de necesidad básica sin la preocupación de gastar mucho dinero, y en algunos casos hasta de generar nuestro propio medio para ganar algunas monedas ¿Qué falta entonces para poner en marcha esta idea? hacernos cargo de nuestra persona, ser pues libremente responsables al mismo tiempo de darnos cuenta que hasta ahora hemos sido manipulados por el mercado y la psicología de mercado.
Es pues necesario sacarse de a la cabeza esas ideas capitalizadas en donde “tanto tienes, tanto vales” al mismo tiempo de saber distinguir lo que realmente es necesario y lo que no, tenemos muchas necesidades física techo, comida, ropa, y ciertamente son importante, pero no solo de necesidades físicas está hecho el ser humano, existen también las necesidades psicológicas o mentales, el psicólogo humanista Maslow creo una pirámide en donde se engloban las necesidades humanas, de forma resumida la pirámide se encuentra formada de manera jerárquica, cada nivel de la pirámide describe necesidades que el ser humano necesita satisfacer para lograr una estabilidad emocional y en algunos casos física.
Ya se ha dicho “El capitalismo genera sus propias necesidades” pero sería mejor decir “El capitalismo juega con las necesidades del ser humano” Maslow inserto en su pirámide las necesidades humanas y de hecho, si vemos esa pirámide podemos fácilmente observar como el capitalismo a través del marketing y la ayuda de la psicología de la mercadotecnia logran insertar mensajes publicitarios que apuntan a satisfacer esas necesidades a través del consumo, pero Maslow no es el culpable, su trabajo lo bajo la clara idea de dar una explicación al comportamiento humano, la culpa, si es que se debe buscar alguno es de los grandes capitalistas y de los psicólogos que utilizan esta como una herramienta para inducir a las personas en un mundo de consumo y de desesperación.
En resumen, la facultad de un individuo para auto-gestionar su vida no tiene un concepto claro, la autogestión no solamente se presenta como una tarea de desligarse exteriormente del sistema capitalista sino que es necesaria también desligarse de manera interna, quitar prejuicios, romper cadenas mentales y sobre todo tener la firme voluntad de que lxs unicxs responsables de nuestras vidas somos nosotrxs mismxs.
A continuación algunos enlaces que pueden ser de utilidad para aquellos que buscan auto-gestionar sus vidas, y depender cada vez más lo menos que se pueda del capitalismo:
http://ecologia.facilisimo.com Reciclado.
https://www.youtube.com/watch?v=w91VOHObK18 Encuadernación artesanal.
https://www.youtube.com/watch?v=xK3d_V1zDCw Curso de serigrafía
http://www.acuedi.org/doc/9302/con-la-comida-no-se-juega-alternativas-autogestionarias-a-la-globalizaci%26Atilde%3B%26sup3%3Bn-capitalista-desde-la-agroecolog%26Atilde%3Ba-y-el-consumo.html Libro “Con la comida no se juega (Alternativas auto-gestionarias a la globalización capitalista desde la agroecología y el consumo)
[1] No debemos caer en la falsa creencia de que para poder alimentarnos es necesario laborar en el sentido de que si no trabajas (por un sueldo) nunca tendrás alimento.
[2] http://web.ecologia.unam.mx/noticias/index.php?noticia=¿Sustentabilidad_o_Sostenibilidad?
[3] Según la R.A.E. Sistema de organización de una empresa según el cual los trabajadores participan en todas las decisiones.
[4] Según R.A.E. Condición de quien, para ciertas cosas, no depende de nadie.
[5] Para una explicación más detallada de lo que refiere a sistema capitalista revisar el escrito anterior al presente en: https://bloquelibertariomexico.wordpress.com/2015/07/09/mexico-y-su-fracaso-en-el-capitalismo/
[6] Desenfreno en las obras o en las palabras. (R.A.E.)